Gran Vigilia de Adoración

Y entrada triunfal de la «Cruz de la Victoria»

Al atardecer del 6 de julio de 2024, los cientos de jóvenes participantes en la primera JEMJ se reunieron en la explanada del Santuario de Covadonga para tener la Gran Vigilia de Adoración. Había estado lloviendo desde la tarde anterior hasta minutos antes de dar comienzo el acto más significativo de la JEMJ.

El P. Luke Demasi y Javier Portela contaron cómo el Señor había entrado en sus vidas. Muchos de los presentes se sintieron muy identificados con sus testimonios.

Como acto sorpresa, una reproducción de la famosa «Cruz de la Victoria» entró triunfante en la plaza.

Para explicar el significado de la «Cruz de la Victoria» original tenemos que remontarnos hasta el año 722 de nuestra era, cuando don Pelayo –al frente de un puñado de guerreros cristianos al amparo de esta Cruz– se enfrentó y venció al poderoso ejército musulmán, en estas mismas montañas, en la batalla de Covadonga. Esa victoria fue el comienzo de la Reconquista de España.

Este gesto preparó el corazón de los jóvenes para escuchar el tercer testimonio de la noche, el del P. Rodrigo Miranda, sacerdote del Instituto del Verbo Encarnado, que narró escenas estremecedoras de las que había sido testigo en la Guerra de Siria. El misionero chileno confesó la ayuda que recibió de los jóvenes católicos sirios para comprender el valor de su sacerdocio y de la Eucaristía en momentos de tan gran sufrimiento.

Llegó finalmente el momento en el que Jesús Eucaristía fue expuesto a la adoración de todos los presentes. Ante Él, una réplica de la «Piedra del Corazón de Jesús del Cerro de los Ángeles», profanado durante la Guerra Civil española, recordaba a los jóvenes el amor inquebrantable de Jesús hacia nosotros.

Aunque la explanada estaba empapada por el agua, la mayor parte de los jóvenes se mantuvieron de rodillas sobre el suelo mojado. Y, aunque el frío de la montaña asturiana iba calando poco a poco, impresionaba el silencio y el ambiente de oración de los jóvenes.

La Vigilia de Adoración terminó con una solemne procesión que llevó a Jesús Eucaristía hasta la Santa Cueva. Allí, en turnos de una hora, los jóvenes acompañaron a Jesús durante toda la noche.

En el nombre de Jesucristo y sostenidos por Nuestra Madre Santísima, cada JEMJ será una nueva batalla donde los jóvenes se reunirán para alimentarse de la Eucaristía, en torno la «Cruz de la Victoria». ¿Te unes a la próxima batalla? Las fechas ya se han hecho públicas: del 4 al 6 de julio de 2025.